CCOO dice que la medida forma parte de "la crónica de una muerte anunciada".La empresa dice que la indemnización, de 30 días por año, era una petición del comité.
La empresa Fujikura-ACE, dedicada a la fabricación de cableado eléctrico para el sector del automóvil, presentó ayer un plan de salidas incentivadas a los trabajadores de la planta del polígono de Malpica-La Puebla, de más de 500 empleos. Ofrece una indemnización de 30 días por año, con un tope de 12 mensualidades, a quienes quieran abandonar la compañía. La propuesta no afectaría de momento a la factoría de Ejea.
El anuncio se produce un día después de que la plantilla respaldara de forma masiva una huelga de 24 horas (tres turnos), convocada por el comité en protesta por unas subidas salariales pendientes y ante la incertidumbre sobre el futuro de la empresa en Aragón.
La dirección de la compañía (controlada en un 60% por la multinacional japonesa Fujikura) y la parte social interpretan de forma muy diferente las motivaciones de esta medida, ante todo sorprendente. El responsable de Recursos Humanos de la planta, Paulino Martínez --exsindicalista de CCOO--, aseguró que la propuesta responde a la petición hecha por el comité en la reunión mantenida en el SAMA con motivo de la huelga. "Parece que hay malestar en la planta. Pues vamos a verlo", aseveró. Según su explicación, los trabajadores tienen de plazo hasta el 18 de diciembre para acogerse al cese incentivado. Ayer nadie se había apuntado. Martínez rechazó que la empresa atraviese dificultades económicas: "La planta va bien, otra cosa es que se líe todo con un problema de interpretación del convenio".
UN SEÑUELO Por el contrario, el comité se mostró ayer molesto por las formas y el "mal fondo" que, en su opinión, esconde esta iniciativa. "La empresa no tiene dinero para aplicar las subidas del convenio y ofrece una indemnización de 30 días. Esto cómo se explica", señaló Celso Hornero, responsable de Acción Sindical de la Federación Minerometalúrgica de CCOO Aragón. En su opinión, se trata de "un señuelo" y a la vez forma parte "de la crónica de una muerte anunciada de la empresa".
Los sindicatos CCOO y UGT se apresuraron ayer a elaborar una nota informativa donde advierten a la plantilla que el objetivo de la empresa es "romper la unidad de los trabajadores" y evitar la convocatoria de una nueva huelga que puede hacer peligrar sus compromisos con Seat. El comité pedirá la próxima semana una reunión con la dirección para reclamar la retirada de la propuesta. Julio Montalvo, delegado del comité, defendió que esta medida debe consultarse antes con el comité y consideró "inaceptable" la indemnización de 30 días, ya que en otras plantas del grupo ha sido de 45 días.
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