EL PCE denuncia las intenciones de Llamazares de expulsarlo de IU

Secretaría de Comunicación del PCE / 21 dic 07
La noticia que se adjunta, aparecida hoy en el Confidencial Digital es la demostración palpable de la opinión que tiene Gaspar Llamazares de lo que debe ser IU, de la purga realizada en la Presidencia del 18 de diciembre y de la anteriores agresiones al PCE y a los militantes que siguen la línea politica de partido como Asturias, ahora Andalucia y Valencia y despues ¿quien será el siguiente?, cabe aquí recordar el poema de Bertold Brech:PRIMERO COGIERON...Primero cogieron a los comunistas,y yo no dije nada por que yo no era un comunista.Luego se llevaron a los judíos,y no dije nada porque yo no era un judío.Luego vinieron por los obreros,y no dije nada porque no era ni obrero ni sindicalista.Luego se metieron con los católicos,y no dije nada porque yo era protestante.Y cuando finalmente vinieron por mí,no quedaba nadie para protestar.Los líderes de Izquierda Unida dan como inevitable la salida del Partido Comunista de la federación que encabeza Gaspar LlamazaresEl Confidencial DigitalViernes, 21 de diciembre de 2007La decisión de Llamazares de prescindir de tres integrantes de la comisión permanente de IU es explicada desde la federación diciendo que no se puede tener dentro de un “órgano de gobierno” a los miembros de la oposición. Y se considera inevitable la salida definitiva del Partido Comunista.En efecto, altos cargos nacionales de Izquierda Unida dan como “inevitable” la salida de los comunistas, que –apuntan- acabarán abandonando la federación, y más pronto que tarde.Algunos de los principales dirigentes comentan que los miembros del PCE se han estancado en los años 20 del siglo pasado, no solamente en las ideas, sino incluso con los símbolos: se dedican a poner las fotografías de Lenin, de Stalin… algo que está completamente fuera de los tiempos actuales.“No he tenido ni tengo nada que ver con esos símbolos, que no son los míos”, añadía uno de estos dirigentes nacionales, que reconocía que muchas veces sentía “vergüenza” cuando comprobaba las posiciones de los viejos comunistas integrados en IU y de los símbolos exhibidos.